Elementos de la Policía de Monterrey fueron fundamentales en el salvamento de un niño de 7 años que padecía epilepsia y sufrió una bronco aspiración.
El menor, trasladado de emergencia por sus padres hacia un hospital, se vio atrapado en el tráfico, lo que llevó al padre a buscar auxilio solicitando ayuda a una patrulla policial.
El oficial Eduardo Santiago, al percatarse del estado crítico del niño, gestionó una ambulancia para su pronta asistencia.
Ante la demora del vehículo de emergencia, el policía activó la sirena y las luces para abrir paso a la familia hacia el Hospital Materno Infantil en Guadalupe, donde el menor fue rápidamente atendido por el personal médico.
La rápida y efectiva actuación del oficial de Monterrey resultó vital para el traslado urgente y oportuno del niño al nosocomio, asegurando así la atención médica inmediata que necesitaba.