No es broma, Javier Duarte podría salir libre en algunos meses.
Y es que la Procuraduría General de la República (PGR) sustituyó su acusación de delincuencia organizada contra el exgobernador de Veracruz, por el de asociación delictuosa.
Este último delito no amerita prisión preventiva oficiosa, por lo que Duarte podría solicitar su libertad bajo fianza.
El priista sigue preso desde 2017 por el delito de lavado de dinero, además de que enfrenta dos cargos más del fuero común en Veracruz.
A pesar de eso, el exmandatario estatal podría pedir, a través de sus abogados, que se le modifique la medida cautelar y enfrentar sus procesos en libertad.
La próxima audiencia del caso está pendiente, pero puede llevarse a cabo entre 30 y 40 días naturales.